Fedegán lidera un plan de vacunación que asegura la sanidad del hato bovino y fortalece la competitividad del sector ganadero en Colombia.
En un país donde la ganadería representa una parte fundamental de la economía rural, las campañas de vacunación son una herramienta esencial para garantizar la sanidad animal y, en consecuencia, la sostenibilidad del sector. La Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) ha sido una pieza clave en esta estrategia, liderando programas que han permitido a Colombia avanzar en el control de enfermedades como la fiebre aftosa, un requisito indispensable para acceder a mercados internacionales y fortalecer la confianza en los productos bovinos del país.
Fedegán y su rol en la vacunación ganadera
Fedegán ha tomado las riendas de las campañas de vacunación desde hace más de dos décadas, consolidándose como líder en la promoción de la sanidad bovina. Estas iniciativas han sido fundamentales para reducir la incidencia de enfermedades que afectan la productividad del sector, permitiendo una mejora significativa en la calidad de la carne y la leche producidas en el país. En 2023, el programa alcanzó una cobertura del 98 %, un logro que posiciona a Colombia como un referente regional en la gestión sanitaria.
La vacunación es el primer paso para garantizar la salud del hato bovino. Al prevenir enfermedades contagiosas como la fiebre aftosa y la brucelosis, Fedegán ha contribuido a la reducción de pérdidas económicas asociadas con bajas en la producción de leche y carne. Esto, a su vez, genera un impacto positivo en los ingresos de los ganaderos, quienes pueden mantener operaciones sostenibles a largo plazo.
El cumplimiento de estándares internacionales de sanidad animal, promovido por Fedegán a través de estas campañas, ha abierto puertas a mercados internacionales. Países como Chile, Rusia y Emiratos Árabes han aumentado sus importaciones de carne colombiana en los últimos cinco años, gracias al estatus sanitario logrado mediante una vacunación eficiente y constante.
Vacunación y el impacto económico
Las campañas de vacunación también tienen un efecto directo en la economía rural. Cada jornada moviliza recursos humanos y logísticos, generando empleo temporal para veterinarios, técnicos y operarios en las zonas rurales más apartadas del país. Esto representa un alivio económico para comunidades que dependen del sector ganadero como su principal fuente de ingresos.
Según cifras del DANE, el sector ganadero aporta cerca del 1,4 % del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. Las mejoras en sanidad animal logradas gracias a las campañas de vacunación incrementan la productividad, fortaleciendo el impacto de este sector en la economía general.
Aunque la cobertura de vacunación ha sido alta, Fedegán enfrenta el desafío de mantener estos niveles en regiones de difícil acceso debido a la geografía o a problemas de orden público. Esto requiere una coordinación efectiva entre el gobierno, el sector privado y las comunidades locales.
Innovación y tecnología
La incorporación de tecnologías, como bases de datos digitales para registrar la vacunación del hato, podría optimizar el proceso y asegurar una mayor trazabilidad. Fedegán ya ha comenzado a implementar soluciones tecnológicas en algunas regiones, sentando un precedente para el resto del país.
Las campañas de vacunación lideradas por Fedegán han demostrado ser un pilar fundamental para la ganadería en Colombia, no solo protegiendo la sanidad animal sino también impulsando la economía rural y fortaleciendo la competitividad internacional del sector. Con una cobertura que supera el 95 %, el programa se posiciona como un ejemplo de gestión eficiente y compromiso con el desarrollo del país. En adelante, el reto será consolidar estos logros y adaptarse a las demandas de un mercado globalizado que exige estándares cada vez más altos.