El rescate del manatí Sobrado de Tiburón fue un trabajo conjunto que duró aproximadamente 36 horas
El manatí «Sobrado de Tiburón», un ejemplar de la especie Trichechus manatus manatus, volvió a estar en el centro de atención luego de enfrentar una peligrosa situación en La Guajira.
Este mamífero marino, liberado meses atrás en la desembocadura del río Don Diego, quedó atrapado accidentalmente en una tubería de una termoeléctrica que alimenta piscinas con agua marina. Su rescate fue liderado por el Centro de Rescate de Fauna Marina, en colaboración con Corpamag, la Fundación CIM Caribe y otras organizaciones ambientales.
El incidente ocurrió cuando el manatí fue succionado por el sistema de captación de agua, generando una respuesta inmediata de Corpoguajira, que notificó a los expertos en fauna marina para coordinar una operación de rescate de emergencia.
La operación de rescate: un esfuerzo conjunto
El rescate de Sobrado de Tiburón fue un trabajo conjunto que duró aproximadamente 36 horas. Veterinarios, biólogos y rescatistas unieron fuerzas para garantizar la seguridad del manatí. Según Carlos Zuluaga, médico veterinario y director del Centro de Rescate de Fauna Marina, el equipo tuvo que actuar con precisión para evitar daños al animal durante el proceso.
“Fuimos informados por la termoeléctrica el martes, pero no logramos recapturarlo de inmediato. Con el apoyo del equipo, logramos ponerlo a salvo el viernes y trasladarlo de vuelta al Centro de Rescate de Fauna Marina”, comentó Zuluaga.
Tras el exitoso rescate, el manatí fue sometido a exámenes médicos exhaustivos para evaluar su estado de salud. Durante el periodo de cuarentena en el centro, será monitoreado de cerca para garantizar su recuperación antes de ser reintroducido nuevamente en su hábitat natural.
Un emblema para la conservación de la biodiversidad
El caso de «Sobrado de Tiburón» subraya la importancia de proteger a los manatíes, una especie clave en los ecosistemas marinos y de agua dulce. Estos animales desempeñan un papel crucial al mantener el equilibrio de los hábitats acuáticos mediante el control del crecimiento de plantas acuáticas.
“Para nosotros, la conservación de esta especie es una prioridad. Son irremplazables en los ecosistemas y enfrentan constantes amenazas debido a la actividad humana”, señaló Julieth Prieto, bióloga marina de Corpamag.
El papel de la tecnología en el seguimiento de los manatíes
Cabe recordar que «Sobrado de Tiburón» fue liberado previamente junto a otro manatí, «Genemeka», ambos equipados con dispositivos de telemetría satelital. Estos equipos permiten monitorear los movimientos de los animales en su entorno natural, proporcionando datos valiosos sobre su comportamiento y ayudando a prevenir futuros incidentes.
Los dispositivos de telemetría no solo son esenciales para el seguimiento de los manatíes, sino que también son herramientas clave en la planificación de estrategias de conservación, ya que ofrecen información detallada sobre las rutas migratorias y las áreas críticas para la supervivencia de la especie.
Retos y aprendizajes del rescate
El incidente también pone en evidencia la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad en instalaciones industriales cercanas a hábitats de especies protegidas. Las termoeléctricas y otras infraestructuras deben implementar sistemas que minimicen los riesgos para la fauna marina y acuática.
La colaboración entre entidades como Corpamag, Corpoguajira y la Fundación Omacha demuestra cómo el trabajo interinstitucional puede marcar la diferencia en la conservación de la biodiversidad. Cada rescate exitoso no solo salva una vida, sino que también refuerza el compromiso con la protección de nuestro entorno natural.
El futuro del manatí Sobrado de Tiburón
A medida que «Sobrado de Tiburón» se recupera en el Centro de Rescate de Fauna Marina, los expertos trabajan para garantizar que su reintegración al mar sea segura y exitosa. Su historia es un recordatorio de los desafíos que enfrentan las especies marinas debido a la actividad humana, pero también de la capacidad que tenemos para protegerlas cuando actuamos con rapidez y compromiso.
La conservación de los manatíes es una labor que requiere esfuerzos continuos. Historias como la de «Sobrado de Tiburón» inspiran a seguir luchando por la preservación de estas criaturas, esenciales para la salud de los ecosistemas y para el legado ambiental que dejaremos a las futuras generaciones.
VER: Genemaka y Sobrado de Tiburón: el regreso triunfal de dos manatíes a su hogar ancestral
