Una enfermera samaria le contó a www.codigoprensa.com todo lo que debe hacer para sortear la carencia de insumos básicos para enfrentar el coronavirus.
Los avisos en las farmacias de: “no hay tapabocas”, se volvió paisaje en Santa Marta desde la declaración de la pandemia por coronavirus.
La situación se ha agudizado de tal manera, que de un tiempo para acá, afecta directamente a quienes deben combatir la enfermedad.
Los profesionales de la salud son quienes deben tener el mejor equipamiento.
El coronavirus es como una lotería, no se sabe quién pueda portarlo y por eso el miedo que despierta entre enfermos y los facultativos.
www.codigoprensa.com dialogó con una enfermera samaria que describe la agonía propia y las de sus colegas por falta de equipos adecuados.
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SIN EXCUSAS
Esta testigo de excepción, relata que sus turnos de trabajo son de siete o 12 horas, dependiendo los casos que ingresen al centro asistencial.
Durante esos períodos, no solamente combate el coronavirus al lado de los médicos, sino también la falta de tapabocas, batas y guantes.
La situación se torna más peligrosa cuando el paciente sufre afección respiratoria porque los niveles de contagio se incrementan exponencialmente.
“Sin saber si se trata de un caso agudo, crónico o contagioso; nuestro deber es atender a todos los pacientes pero no tenemos como protegernos”. Cuenta.
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SIN INSUMOS
En el caso de esta enfermera samaria, la situación es mucho más arriesgada debido a que ella misma es paciente por cuenta de una enfermedad respiratoria.
“Siempre debo portar un inhalador y un tapabocas, elementos que mantienen estable mi afección y me protegen a la hora de atender pacientes”. Anota.
Los profesionales de la salud reclaman más insumos. Foto Ilustrativa
Todos los días, a esta enfermera no le queda sino confiar que su tapabocas desechable la va a mantener a salvo de contraer el coronavirus. ¡Nada puede hacer!
Ella, como todas sus compañeros y compañeros, deberían recibir una dotación de tapabocas N.95 porque es el único que filtra en 95 % las partículas del aire.
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SIN AUXILIO
La falta de equipamiento de bioseguridad, abarca a civiles y personal médico por igual. Así lo informó la Sociedad de Anestesiología de Magdalena.
Por medio de una carta dirigida a Carlos Eduardo Caicedo Omar, solicitaron la dotación de los centros hospitalarios de Santa Marta con los insumos.
La Sociedad de Anestesiólogos exigió garantías a Carlos Eduardo Caicedo Omar.
Los anestesiólogos exhortaron a Caicedo Omar, acercarse a las empresas de textiles y al SENA, para acelerar la producción de trajes de bioseguridad.
La organización de especialistas calcula que habrá más contagiados en Santa Marta. Al cierre de esta historia se registraban 26 casos y una muerte.
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