Con una insólita tipología de golosinas, la Universidad del Magdalena obtiene su segunda patente de invención; un aporte para una alimentación divertida.
Todas las mamás saben que hacer que un niño coma proteínas y verduras, es un verdadero viacrucis. ¡La Universidad del Magdalena acaba de solucionar eso!
Además de responder un dilema del universo (cómo hacer que los niños coman), con este invento la Universidad del Magdalena consiguió su segunda patente.