Un hecho inesperado minutos antes de su presentación no permitió que Karen Milena clasificará a la siguiente fase del reallity.
A principios de año www.codigoprensa.com publicó la historia de una samaria que después de arduos entrenamientos logró ser una de las participantes del programa televisivo.
Karen Milena vive en Alicante, España desde hace más de dos años. El amor la llevó al viejo continente. Usa sus redes sociales para motivar a sus seguidores en el tema Fitness.
Su amor por el deporte le despertó la ilusión por participar en el Reallity deportivo más exigente del mundo. Por un año se preparó en solitario físicamente y mentalmente.
Durante este tiempo, Jolí se estableció metas a cumplir; Una a una las fue logrando, siempre creyó en su potencial, tal vez esa confianza en si misma fue la que la llevó tan lejos.
LA HAZAÑA POR UN SUEÑO
Tras estar esperando pacientemente la próxima convocatoria, su momento llegó. Fue en diciembre de 2017 cuando las pautas anunciaban los castings para la segunda temporada.
El martes 12 de diciembre Karen Milena tomó su bolso y viajo a Madrid. Adherida a un GPS logró llegar al lugar de la convocatoria en medio de un inclemente frío, muy común para fin de año es España.
Fue una de las primeras personas en llegar al casting, cumplir este sueño fue la antorcha que la mantuvo encendida ante las bajas temperaturas que vivió antes de empezar las pruebas.
Más de cuatro mil personas se presentaron en las cuatro convocatorias realizadas en España. Esta samaria fue escogida entre las 120 mejores participantes del concurso.
UNA CAMPEONA EN LA ADVERSIDAD
Pasados dos meses de esta hazaña en la capital española, Karen fue llamada a las grabaciones del concurso, estaba dispuesta a conquistar el ‘Ninja Warrior’.
Minutos antes de ingresar al escenario y mientras que entrenaba algunas pruebas, Milena tuvo un esguince de tobillo. Para muchos el sueño de la única colombiana en el concurso había terminado.
Los paramédicos le aplicaron anti-inflamatorios, hielo y vendas. A pesar de todos los esfuerzos, el dolor persistía. Los organizadores trataron de impedir su participación, ella sin importarle nada subió al escenario.
Karen Milena Jolí Tete superó la primera prueba, aquella donde el tobillo es el centro de apoyo. Tras caer en la siguiente prueba, su conquista fue única. Venció los miedos y representó a Santa Marta como nunca, con el alma.