Portada Portada Inés Gutiérrez denuncia ‘rosca’ y mala administración en fondos culturales

Inés Gutiérrez denuncia ‘rosca’ y mala administración en fondos culturales

Por Álvaro Quintana Mendoza
Inés María Gutiérrez Parejo, portavoz del sector cultural en Santa Marta.

La gestora cultural Inés Gutiérrez documentó falta de transparencia, favoritismos y recursos sin destino claro del Programa de Estímulos.

Inés María Gutiérrez Parejo, reconocida gestora cultural y portavoz del sector artístico en Santa Marta, ha lanzado una grave denuncia contra el Programa de Estímulos liderado por la Secretaría de Cultura del Distrito. Según Gutiérrez, el programa que busca apoyar iniciativas culturales locales presenta múltiples irregularidades en su gestión y ejecución, afectando la confianza y participación del sector cultural de la ciudad.

Plazos insuficientes y falta de adaptación

Uno de los puntos críticos expuestos por Gutiérrez se centra en el limitado tiempo de ejecución asignado para los proyectos beneficiados. A diferencia de programas como el Programa Nacional de Concertación Cultural del Ministerio de Cultura, que permite a los beneficiarios hasta diez meses para la implementación de sus propuestas, el Programa de Estímulos de Santa Marta fijó un plazo de solo un mes, lo cual, según Gutiérrez, es insuficiente y afecta la calidad de los proyectos. “No es posible que se lancen proyectos culturales con tanta premura y falta de planeación. Esto limita enormemente el impacto y alcance de los proyectos”, afirmó.

Además, Gutiérrez señaló que este programa parece una adaptación improvisada de programas previos, en particular del Fondo Distrital de Cultura y las Artes (FODCA), implementado en 2016 tras un acuerdo entre el entonces alcalde Rafael Martínez y representantes del sector cultural. “En algunos formularios de presupuesto, incluso aparece el nombre ‘FODCA’, lo que evidencia una falta de adaptación y planificación para las necesidades actuales”, afirmó la gestora.

unimagdalena inscripciones 2024

Denuncias de favoritismo y participación irregular

El proceso de selección de proyectos también ha sido objeto de crítica. Gutiérrez denunció que el programa permitió que dos personas diferentes presentaran el mismo proyecto, una práctica que contradice las normas de postulación y podría beneficiar a ciertos grupos dentro de la administración cultural. Según la vocera, esto es evidencia de una red de favoritismos que opera dentro del sector, favoreciendo a quienes están en la llamada ‘rosca’ o círculo de influencias.

Otro punto polémico es la participación de miembros del Consejo de Cultura del Distrito en el proceso, quienes, de acuerdo con las regulaciones, no deberían ser candidatos debido a su vínculo directo con la administración distrital. Gutiérrez señaló que algunos proyectos seleccionados fueron presentados por estos miembros, lo que compromete la imparcialidad del proceso.

¿Dónde están los recursos faltantes?

La opacidad en la gestión financiera del programa es otro de los cuestionamientos planteados por Gutiérrez. Según la cultora, inicialmente se anunció un presupuesto de 1.398 millones de pesos para financiar un total de 91 estímulos. Sin embargo, solo se adjudicaron 967 millones de pesos a 75 proyectos, dejando un saldo de 431 millones sin explicación ni destino claro. Gutiérrez cuestiona el uso de estos fondos y sugiere que podrían haber sido desviados para otros fines no relacionados con el sector cultural.

“Han indicado que esos fondos se están usando para cubrir gastos administrativos, como nóminas. Pero eso no debería ser excusa para recortar los recursos destinados a la cultura”, expresó la vocera. La falta de un veedor o de un representante que supervise la correcta distribución de los recursos también ha sido señalada como un problema crítico.

Falta de compromiso con los gestores culturales

A esta situación se suma la demora en las contrataciones de los operadores y técnicos del programa, que no fueron formalizados sino hasta septiembre de 2024, a pesar de que el programa debería haber comenzado a principios de año. Esto significa que varios contratistas debieron trabajar sin remuneración en los primeros meses, una situación que Gutiérrez considera inaceptable y perjudicial para la confianza en el programa.

La ausencia de pagos puntuales ha generado inestabilidad en el equipo operativo y cuestionamientos sobre el compromiso real de la Secretaría de Cultura con el fortalecimiento del sector cultural en la ciudad.

Historial de controversias en la administración cultural

Estas denuncias no son los únicos cuestionamientos a la gestión del secretario de Cultura, Darío Linero. En julio, la administración utilizó 7.200 millones de pesos en la organización de la Fiesta del Mar, un evento de cuatro días que fue calificado por varios sectores como un gasto excesivo y poco eficiente. “Esos recursos pudieron haber tenido un impacto más profundo en proyectos sostenibles, como las Escuelas de Formación Artística y Cultural (EFAC)”, criticó Gutiérrez. Las EFAC, contempladas en la política pública nacional y con un presupuesto aproximado de 3.000 millones de pesos, han sido suspendidas por falta de recursos.

Además, el Festival de Comida Samaria, otro evento financiado por la Secretaría de Cultura, generó críticas de parte de la reconocida chef Leonor Espinosa, quien denunció irregularidades en la organización y abuso de poder. Espinosa, jurado del evento, señaló que el trato recibido fue irrespetuoso y, en algunos casos, machista, lo que evidencia un clima laboral adverso.

VER: Controversia por declaraciones de MinCultura sobre los 500 años de Santa Marta

Te podría interesar