Con cada paso de su vida, Jaime Alberto Linero Ladino se volvió una especie de ‘rockstar’ del liderazgo barrial y político en Santa Marta.
Al fallecido Jaime Alberto Linero Ladino le sucedió lo del tipo al que ‘del cielo le cayeron los clavos’ porque irremediablemente estaba llamado a ser carpintero.
‘El Pecas’, como lo conoció su círculo íntimo, nació para servirle a la gente: fue representante sindical, miembro de junta de acción comunal y dos veces concejal.
La política y lo que ella implica estaba en su ADN. Todo en su vida se concentró en llevarle bienestar a sus compañeros de trabajo, vecinos y conciudadanos.
Es hijo de la Urbanización El Parque, el populoso sector ubicado al suroriente de Santa Marta que nunca lo olvidará, porque con un estilo propio, allí hizo historia.
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¡BARRIO DEL ALMA!
Jaime Alberto Linero Ladino nació en una época en la que aún se creía en las bondades que ofrecía el ejercicio político y hacer fiel militancia en un partido.
Como empleado de la desaparecida Lotería del Libertador destacó como líder sindical, intermediario y defensor de los derechos laborales de sus compañeros.
Para entonces, combinaba su actividad sindical con las tareas que más le gratificaban: ser responsable del bienestar y mejoramiento de su comunidad.
Su huella quedó grabada en obras de pavimentación, la construcción de parques recreativos, el arreglo de escenarios deportivos y la adecuación de colegios.
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POLÍTICA QUE SEDUCE
Jaime Alberto Linero Ladino fue un adelantado a su época, políticamente hablando. El contacto con la dirigencia de entonces incrementó su vocación social.
Se codeó con líderes conservadores y liberales, deambuló por ideologías progresistas y libertarias; pero al final de cuentas lo que siempre hizo fue servir.