James Ariza Barraza, uno de los cerebros detrás de la mega obra “La ventana de los Sueños” en Puerto Colombia.
El samario James Ariza Barraza, arquitecto y profesor, se destaca como ganador del concurso para la creación de «La Ventana de los Sueños», fusionando su arte y enseñanza.
Egresado de la Universidad del Atlántico, Ariza forjó su reputación desde sus primeros días en el ámbito arquitectónico. Su destreza se refleja en el diseño arquitectónico donde ha demostrado grandes habilidades.
Tras completar su formación universitaria, Ariza se lanzó de lleno al mundo laboral, centrando su enfoque en la creación de edificaciones tales como casas, apartamentos y oficinas, obras en las que trabaja principalmente Haba.
Buscando la excelencia y el enriquecimiento de su perspectiva, Ariza amplió su horizonte académico con una maestría en Técnicas Avanzadas en Proyectos Arquitectónicos en la universidad europea, con sede en Madrid.
HABA ARQUITECTOS: TRASCENDIENDO EN LO CONVENCIONAL
La firma arquitectónica Haba, forjada por los hermanos Ariza, se aventura en la creatividad con la «Ventana de los Sueños», primera obra artística en la que se encuentra Haba.
Este faro, más allá de lo convencional, refleja una fusión única de creatividad y visión. La experiencia fue excepcional para Haba Arquitectos. Este proyecto contemporáneo destaca al fusionar arte, ingeniería, visión y cultura, trascendiendo en la arquitectura actual
Aunque James Ariza lidera como principal arquitecto, su colaboración estrecha con el ingeniero Ariza desde el principio demuestra la complementariedad de la arquitectura e ingeniería en esta obra singular.
La «Ventana de los Sueños» no solo celebra la unión de Haba Arquitectos e Ingenieros, sino que resalta la colaboración fraternal de los hermanos Samarios.
LA VENTANA DE LOS SUEÑOS: MÁS QUE UN FARO
Aunque la «Ventana de los Sueños» es técnicamente un faro, su singularidad radica en ser un monumento conmemorativo. James Ariza, con su ingenio y talento dio pie a la transformación de la concepción tradicional.
Este proyecto marcó la diferencia al incorporar la visión de los niños de las escuelas de Puerto Colombia, fusionando su creatividad con el romanticismo en esta mega construcción.
El diseño del faro no se limitó a la forma obvia; en cambio, rindió homenaje a la historia marítima con la incorporación simbólica de una vela de embarcación deportiva.
Este concepto celebra la llegada de inmigrantes al país a través del puerto, convirtiendo la construcción en un testimonio visual de la historia y la diversidad cultural.
ARIZA: SÍMBOLO DE SIMPLICIDAD Y RESISTENCIA
Inspirado por Alvaro Siza, Renzo Piano y Norman Foster, James Ariza abraza la premisa de que «menos es más». Su estilo, simple y resistente, busca la unicidad y funcionalidad en cada proyecto.
Ariza va más allá de las estructuras; ve la arquitectura como una conexión crucial con el contexto social. Cree que esta conexión puede impactar positiva o negativamente en el bienestar colectivo.
Con una visión holística, Ariza entiende que la arquitectura trasciende muros y vigas. Para él, es un elemento transformador en el bienestar colectivo.
James Ariza, más que un arquitecto de proyectos, es un maestro en fusionar arte, ingeniería y visión en cada obra.
