A través de la primera jornada de salud integral, la Universidad del Magdalena fortalece el bienestar en mujeres y niños de Santa Marta.
La Universidad del Magdalena dio un paso firme hacia el fortalecimiento del bienestar de la comunidad con la realización de su primera jornada de salud integral, centrada en atender a mujeres en edad fértil y niños de cero a 12 años.
Organizada por el Centro de Atención Integral a la Infancia de la institución, la actividad contó con la colaboración de varias organizaciones aliadas, tales como el Centro Médico La Esperanza, Pro-Magdalena, Natalis IPS y la Empresa Social del Estado Alejandro Próspero Reverend. Este evento marcó un importante precedente en la atención de salud comunitaria, beneficiando tanto a miembros de la universidad como a la población externa.
bienestar para mujeres y niños
La jornada de salud se enmarcó dentro de la estrategia Instituciones Amigas de la Mujer y la Infancia, una iniciativa que busca mejorar la calidad de vida de las mujeres en edad reproductiva y los niños en su primera etapa de vida.
Este evento representa un esfuerzo por parte de la Universidad del Magdalena por contribuir al bienestar físico y mental de la comunidad, garantizando el acceso a servicios de salud que no siempre están disponibles para todas las familias de Santa Marta.
“Estamos trabajando para que ningún niño quede desatendido y sus derechos de salud se vean protegidos”, afirmó Alison Paola Llanes Lobo, coordinadora de la Sala Amiga de la Familia Lactante de la Universidad del Magdalena.
Esta declaración refleja el compromiso de la universidad con los más vulnerables, poniendo en el centro de sus acciones la atención integral de las madres y los niños de la región.
Servicios médicos y de prevención
Durante la jornada, los asistentes tuvieron acceso a una amplia gama de servicios médicos. Entre estos destacaron consultas de fisioterapia para la estimulación temprana de los niños, consultas de nutrición, psicología, profilaxis dental, vacunación y planificación familiar. También se llevaron a cabo actividades de prevención como la vacunación contra enfermedades comunes y el despistaje de enfermedades crónicas.
Para muchas mujeres y niños, especialmente aquellos que no cuentan con acceso regular a servicios médicos, esta jornada representó una oportunidad única para recibir atención y orientación profesional en un solo lugar. “Es un alivio saber que en un mismo día podemos acceder a todos estos servicios”, comentó Ingrid Daniela Serrano Cañizales, estudiante del Programa de Ingeniería Ambiental y Sanitaria, quien destacó la importancia de estas jornadas para las estudiantes madres que enfrentan dificultades para acceder a atención médica mientras cumplen con sus estudios.
Fortalecimiento de las alianzas intersectoriales
Uno de los elementos clave que permitió la realización exitosa de esta jornada fue la colaboración interinstitucional e intersectorial. Las alianzas estratégicas con entidades como Pro-Magdalena, Natalis IPS y la Empresa Social del Estado Alejandro Próspero Reverend fueron fundamentales para ampliar la cobertura y calidad de los servicios prestados durante el evento.
Este tipo de cooperación permite que instituciones como la Universidad del Magdalena puedan ampliar su impacto social, uniendo esfuerzos con actores clave en la prestación de servicios de salud. Según Llanes Lobo, “estas alianzas garantizan que las familias reciban una atención integral y continua, con la posibilidad de dar seguimiento a los casos más urgentes”.
Además, la participación de estas instituciones no se limitó a la atención médica. También se realizaron actividades educativas y de sensibilización en temas de prevención, autocuidado, vacunación y salud sexual y reproductiva, aspectos fundamentales para la construcción de una cultura de bienestar en la comunidad.
Impacto en la comunidad
La jornada tuvo un impacto significativo en los participantes, no solo por la atención médica inmediata que recibieron, sino también por la oportunidad de adquirir conocimientos esenciales sobre el autocuidado y la prevención de enfermedades. La Universidad del Magdalena ha demostrado ser un actor clave en la mejora de la calidad de vida de su comunidad, particularmente en un contexto donde muchas personas carecen de acceso regular a servicios de salud.
De acuerdo con estadísticas de la Secretaría de Salud de Santa Marta, el acceso a atención médica en áreas vulnerables sigue siendo limitado, con cerca del 30% de la población en situación de pobreza extrema. Eventos como este tienen un papel crucial para cerrar esta brecha, contribuyendo al fortalecimiento del tejido social y al mejoramiento de las condiciones de vida de los más necesitados.
Autocuidado y educación en salud
A través de esta jornada, la Universidad del Magdalena no solo buscó atender las necesidades inmediatas de la población, sino también educar sobre la importancia del autocuidado. Se brindaron charlas sobre hábitos de vida saludables, alimentación balanceada, cuidado dental, la importancia de las vacunas y la prevención de enfermedades de transmisión sexual como el VIH. La sensibilización en temas de planificación familiar también fue un punto crucial, permitiendo que las mujeres tuvieran acceso a métodos anticonceptivos y orientación médica.
Uno de los grandes desafíos en el acceso a la salud en la región ha sido la falta de educación en torno al autocuidado. Según estudios recientes del Ministerio de Salud, solo el 45% de las mujeres en zonas rurales de Magdalena acceden a consultas preventivas como citologías o control prenatal. Esta jornada representa una oportunidad para revertir esas cifras mediante la concientización y la creación de una cultura de prevención y bienestar.
Estudiantes y personal académico
La participación activa de estudiantes y docentes en la organización y ejecución de la jornada fue otro de los aspectos destacados. Estudiantes de diversas áreas de la salud, entre ellas Enfermería, Medicina y Psicología, se unieron al personal médico y administrativo para garantizar la correcta atención de los asistentes.
Además, los estudiantes tuvieron la oportunidad de realizar prácticas profesionales en un entorno real, lo que no solo les permitió poner en práctica sus conocimientos, sino también entender el impacto directo de su labor en la vida de las personas. “Es una experiencia enriquecedora poder ayudar y ver los resultados inmediatos en la salud de los niños y las madres”, comentó Laura Mendoza, estudiante de último semestre de Enfermería.
Iniciativas Universidad del Magdalena
El éxito de esta primera jornada ha generado un compromiso aún mayor por parte de la Universidad del Magdalena para continuar impulsando actividades similares en el futuro. La institución ha señalado que tiene previsto realizar jornadas de salud integral de manera periódica, con el fin de garantizar la continuidad en la atención y el seguimiento de los casos más críticos.
Con la vista puesta en el futuro, la universidad espera expandir la cobertura de estas jornadas, llegando a más sectores vulnerables de Santa Marta y el Magdalena. “Nuestro objetivo es llevar estos servicios a las zonas rurales donde el acceso a la salud es aún más limitado”, indicó Jorge Antonio Támara Pérez, director del Centro de Atención Integral a la Infancia.
En este sentido, la Universidad del Magdalena busca consolidarse como un referente en el ámbito de la responsabilidad social universitaria, demostrando que las instituciones educativas pueden y deben desempeñar un rol activo en el bienestar de las comunidades que las rodean.
VER: Jornada de Internacionalización refuerza el papel de la Universidad del Magdalena