Código Prensa conversó con el director de Sostenibilidad de la empresa, sobre el importante reconocimiento que se hizo público hace algunas horas.
99 empresas participantes de todo el mundo. Algunas, avaluadas en billones de dólares, con una extensión de tierras que bien podría representar a toda la industria nacional.
Pero, fue Daabon, la empresa que exporta poco más de 55.000 toneladas de palma de aceite, frente a los 80 millones de los países líderes de la industria; quien acaba de destacarse ante el mundo por sus prácticas de sostenibilidad.
Es todo un logro, casi una proeza. Y así lo recibe Felipe Guerrero, director de Sostenibilidad del Grupo Daabon, que condensa por lo menos el 65% de sus actividades económicas, a la producción de aceite de palma.
TODO SE HACE AQUÍ
Cuyas cosechas, se concentran en fincas ubicadas en gran parte del área rural del Magdalena, como Aracataca, Fundación y El Retén,
Desde donde el aceite de palma, es llevado a las refinerías ubicadas en Santa Marta, para posteriormente ser exportadas a países como Japón, Inglaterra, Australia y Estados Unidos, a través de la Sociedad Portuaria.
Sin embargo, fue mucho más que el buen rendimiento comercial, lo necesario para lograr el reconocimiento por parte de SPOTT, la organización que rastrea la transparencia de las empresas palmeras a nivel internacional e incentiva la utilización de mejores prácticas empresariales.
Por lo cual, aquí entran en juego importantes proyectos de sostenibilidad ambiental y fundamento social, que quizás pasan inadvertidos ante miles de magdalenenses.
PRODUCCIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA
Un ejemplo de esto, es el proceso que lidera actualmente Daabon para la captura de gases de efecto invernadero, que viene implementando desde 2011, a través del proyecto ‘Mecanismo de Desarrollo Limpio’.
En el cual, en la extractora Tequendama, ubicada en Aracataca, llevan a cabo la captación del agua que requieren para adelantar sus procesos de cosecha. Y, cuando esta finalmente es empleada, no es simplemente desperdiciada.
Sino que es concentrada en unas estructuras de reposamiento, donde es sometida a un proceso químico con bacterias que en su etapa final, produce gas metano.
Permitiendo consigo la producción de energía eléctrica, que no sólo utiliza la empresa, sino que incluso, es ofertada a las empresas encargadas de este servicio en el país.
MUJERES Y GENERACIONES DE FAMILIA
Igualmente, la inclusión de madres cabeza de hogar y los procesos de acompañamiento socioeconómico a sus colaboradores, fue uno de los ítems determinantes para la obtención del reconocimiento.
Puesto, que la mayoritaria participación de la población rural femenina en los procesos productivos; así como las constantes lideradas para promover la profesionalización técnica y académica de las comunidades, hacen parte de ese ‘plus’ que vende la empresa.
Ya, que como lo menciona Felipe Guerrero, Daabon se enfoca no sólo en la venta de aceite de palma. Sino en vender experiencias, cultura e historias que se hacen evidentes en las generaciones de familias que durante décadas, han integrado las filas laborales de la empresa.