Hablamos con la rectora de la Normal Superior María Auxiliadora, elegida como una de las mejores instituciones del país y del departamento.
El ambiente parece ser siempre festivo. Las pinturas, manualidades y carteleras adornan cada pasillo de esta imponente infraestructura que luce magníficamente conservada, sobre todo teniendo en cuenta que está en pie desde 1951.
Desde entonces, ha sido la congregación de las Hermanas Salesianas, las que han dirigido este plantel educativo que en la actualidad condensa a 1784 estudiantes, desde transición hasta el Programa de Formación Complementaria.
Es así, como un colegio, orientado a la formación de maestras; se ha determinado como uno de los epicentros de la educación pública de calidad. Sin embargo aquí la preocupación va más allá del rendimiento académico.
La creatividad, el don de servicio, la excelencia y la fe en Dios; son sólo algunos de los valores institucionales de la Escuela Normal, que como lo manifiesta su rectora, la Hermana Mónica Tausa “está inspirada en el modo de ser y actuar de Jesús”.
LA NORMAL ENTRE LAS MEJORES DE COLOMBIA
Y, esa ha sido la clave, según la directiva, para que la institución siempre esté en la cúspide de los listados de excelencia formativa mientras que paralelamente, se destaca en los ámbitos de innovación pedagógica.
No en vano, la escuela logró ser parte de las únicas 45 instituciones, de las 9.400 que tiene el país, en clasificar en las Pruebas Colsapiens, por la que se evalúa los mejores colegios de Colombia según su categoría, calidad y acreditación internacional.
Siendo la única institución de todo el Magdalena y por ende del Distrito, que logró tal hazaña. Respaldado a su vez con la obtención del primer lugar entre todos los colegios públicos de la ciudad, según los resultados obtenidos en las recientes pruebas ICFES.
Pero… ¿Qué hace esta institución para posicionarse en las listas de excelencia, aun siendo un colegio de tipo oficial?
LA CLAVE DEL ÉXITO
Según Tausa; las directivas, maestros, padres de familia y las mismas estudiantes, son conscientes de los obstáculos que lastimosamente tienen que hacerle frente como institución pública.
Pues, no están exentas de verse afectadas por los paros de maestros, la burocracia de los entes departamentales y las falencias en el nombramiento de docentes idóneos para responder a los distintos campos disciplinarios.
No obstante, conscientes de esta realidad, la comunidad educativa se ha visto comprometida en hacer esfuerzos adicionales. Los excelentes resultados de las pruebas son evidencia de ello:
Las niñas y jóvenes asistieron durante meses, los días sábados, a jornadas de profundización teórica. Mientras que al mismo tiempo, sacaban adelante proyectos institucionales para fortalecer la lectura y el pensamiento crítico.
INVESTIGACIÓN Y FE
Desde preescolar hasta undécimo grado, desarrollan sus clases a partir de una metodología por la que las ciencias afines, son integradas. Liderando asimismo, investigaciones científicas bajo los parámetros del mismo Colciencias.
Como si fuera poco, todo este esfuerzo académico no merma los compromisos propios de la formación salesiana; la celebración del día de la Gratitud, las novenas a la Virgen, la participación en las eucaristías semanales y los voluntariados como docentes en instituciones de la ciudad.
Toda una proeza, que no fuese posible sin eso que llama la rectora de “crear expectativas positivas frente a los otros”. Por eso, la confianza es el motor que impulsa a estas niñas a seguir preparándose y volando alto.
Ya, que al final, la Normal Superior María Auxiliadora, siempre será más que un colegio. Es un hogar. Y el ser normalista, es una marca que se lleva por siempre.