Según Santa Marta cómo vamos, La reducción de la pobreza monetaria en Santa Marta durante 2023, permitió a más de 23.000 personas salir de esta condición.
La pobreza es uno de los mayores desafíos que enfrenta cualquier ciudad, y Santa Marta no es la excepción. Sin embargo, las cifras recientes ofrecen una luz de esperanza. Según el Informe de Calidad de Vida 2023, más de 23.000 samarios lograron salir de la pobreza monetaria, marcando un importante avance en la lucha por mejorar las condiciones de vida en la ciudad. Este logro refleja un progreso significativo, aunque persisten desafíos importantes en otras áreas críticas, como el desempleo y la informalidad laboral.
En Colombia, se considera pobre a una persona que no alcanza un ingreso mensual de 218.000 pesos, cifra que no le permite cubrir sus necesidades básicas. A nivel nacional, este umbral sirve como referencia para medir la pobreza monetaria, pero en Santa Marta, las dificultades son más profundas y complejas, lo que hace que cualquier avance en este campo sea de gran relevancia.
Retos de la informalidad laboral
A pesar de los avances en la reducción de la pobreza, la informalidad laboral sigue siendo un problema estructural que afecta a la ciudad de manera considerable. Según datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), Santa Marta ocupa el cuarto lugar en cuanto a proporción de trabajadores informales entre las ciudades principales de Colombia. Durante el periodo entre septiembre y noviembre de 2023, el 62 % de la población ocupada en la ciudad estaba en la informalidad, lo que perpetúa un ciclo de vulnerabilidad económica.
Esta alta tasa de informalidad implica que solo el 27 % de los 555.030 habitantes de Santa Marta cuentan con un empleo formal, es decir, con acceso a beneficios laborales y protección social. En palabras del secretario de Desarrollo Económico y Competitividad de Santa Marta, Carlos Jaramillo Ríos, “tenemos clara la situación en la que encontramos a Santa Marta y las proyecciones negativas que hay a nivel nacional. Enfrentamos desafíos como el aumento del desempleo en el último trimestre de 2023, inflación, informalidad laboral, contracción en sectores clave y disminución del turismo”.
Sectores con mayor generación de empleo formal
A pesar de la alta informalidad, algunos sectores han mostrado una capacidad para generar empleo formal, destacando entre ellos la construcción, el alojamiento y los servicios de comidas. La construcción ha crecido de manera notable gracias a los proyectos de desarrollo urbano, como la construcción de nuevas vías, edificios residenciales y obras de infraestructura que buscan modernizar a Santa Marta de cara a su celebración de 500 años.
El turismo, tradicional motor económico de la ciudad, ha sido afectado por las fluctuaciones económicas, pero sigue siendo un sector clave para la creación de empleo formal, especialmente en actividades relacionadas con el alojamiento y la restauración. La reactivación turística postpandemia ha traído consigo la apertura de nuevos hoteles y restaurantes, lo que ha ayudado a aliviar la situación laboral de miles de samarios.
Progresos y comparativos de la pobreza
En los últimos tres años, Santa Marta ha registrado un avance considerable en la reducción de la pobreza. En 2021, el porcentaje de pobreza monetaria era del 37.9 %; para 2022, esta cifra bajó al 36.4 %. Ahora, con los datos de 2023, entregados por ‘Santa Marta Como Vamos’, la pobreza se ha reducido al 32.7 %, lo que implica que más de 23.000 personas han dejado atrás esta condición. Además, la pobreza extrema -definida como aquellas personas que no alcanzan un ingreso suficiente para cubrir sus necesidades alimentarias- también ha disminuido, situándose en el 9.6 %, una reducción significativa que ha beneficiado a casi 20.000 personas.
A pesar de estos avances, Santa Marta sigue siendo una de las capitales del Caribe colombiano con mayor incidencia de pobreza extrema, lo que evidencia la necesidad de políticas públicas continuas para atacar el problema desde su raíz.
Desafíos persistentes: La pobreza extrema
Aunque la reducción de la pobreza es un logro notable, la pobreza extrema sigue afectando a una proporción considerable de la población. Las personas que viven en pobreza extrema enfrentan no solo la falta de ingresos, sino también la ausencia de acceso a servicios esenciales como salud, educación y vivienda. La gestión pública local ha reconocido este desafío y ha señalado la importancia de una intervención integral, que incluya tanto la mejora en la infraestructura como la generación de oportunidades económicas más inclusivas.
La administración municipal, en colaboración con el gobierno nacional y entidades internacionales, ha comenzado a trabajar en proyectos que aborden la pobreza extrema desde múltiples frentes, como el acceso a viviendas dignas y programas de capacitación laboral. Estas iniciativas buscan no solo reducir los índices de pobreza, sino también generar cambios estructurales a largo plazo.
Impacto económico y social de la reducción de la pobreza
La disminución de la pobreza tiene implicaciones profundas en la economía local y el bienestar de la ciudad. Menos personas en situación de pobreza significan un aumento en el consumo interno, lo que favorece el comercio local y dinamiza sectores clave como el turismo y la construcción. Además, la reducción de la pobreza está estrechamente vinculada con una mejor calidad de vida en términos de salud, educación y acceso a servicios básicos.
El informe de 2023 sirve como una herramienta crucial para la toma de decisiones en el ámbito de la política pública. En un contexto en el que Santa Marta se prepara para celebrar sus 500 años, es fundamental que las estrategias para el desarrollo económico y social sigan enfocadas en garantizar una mayor equidad y sostenibilidad para todos los samarios.
Santa Marta cómo vamos y la mirada hacia el futuro
Aunque Santa Marta ha logrado avances significativos en la lucha contra la pobreza, los retos que enfrenta siguen siendo enormes. La informalidad laboral, el desempleo, la alta dependencia del sector turístico y los efectos de la inflación son obstáculos que requieren una acción coordinada entre los sectores público, privado y académico. El secretario de Desarrollo Económico, Carlos Jaramillo Ríos, ha subrayado la necesidad de políticas estructurales que aborden estas problemáticas de manera integral, especialmente en sectores como el empleo formal y la formación para el trabajo.
Para continuar reduciendo la pobreza y lograr una transformación sostenible, es esencial que los esfuerzos se enfoquen en fortalecer las capacidades productivas de los samarios y fomentar la creación de empleos de calidad. El desafío no es solo reducir las estadísticas, sino crear las condiciones para un desarrollo inclusivo y equitativo en Santa Marta.
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