Portada Portada Santa Marta en alerta: ¿Qué hay detrás del aumento de robos bancarios?

Santa Marta en alerta: ¿Qué hay detrás del aumento de robos bancarios?

Por Vanessa Montenegro Zabaleta
Robos a bancos en Santa Marta

Incertidumbre y temor en Santa Marta ante la seguidilla de robos bancarios en mayo. Con cinco entidades financieras asaltadas y un carro de valores.

El mes de mayo, ha sido testigo de una escalada preocupante en los robos bancarios en la ciudad de Santa Marta. Con cinco asaltos a bancos y un atraco a un carro de valores, la seguridad financiera de la ciudad se encuentra bajo amenaza. Este preocupante patrón de delitos comenzó en abril con un asalto al Banco BBVA y ha continuado sin tregua. La comunidad está alarmada, y las autoridades se enfrentan al desafío de desmantelar estas organizaciones criminales que operan con una aparente impunidad.

04 de Abril: el primer asalto

El 4 de abril, la sede del Banco BBVA en la Avenida del Libertador con carrera 19 fue escenario de un violento taquillazo. Hombres armados ingresaron simulando ser clientes y bajo amenazas, se llevaron una cantidad no especificada de dinero. Este incidente fue el presagio de una ola de crímenes que sacudiría a Santa Marta en las semanas siguientes.

6 de mayo: Bancamía en la mira

Apenas comenzado mayo, la mañana del lunes 6 trajo otro golpe. La sucursal de Bancamía, ubicada en la Carrera 5ta, fue asaltada por individuos armados que se llevaron una suma millonaria de dinero, además de pertenencias personales de los presentes. Los delincuentes, huyeron en motocicletas antes de que llegaran las autoridades.

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13 de mayo: El Rodadero no está a salvo

Una semana después, el 13 de mayo, el Banco Davivienda en El Rodadero fue atacado. Alrededor de las 9:30 a.m., varios individuos armados llegaron en motocicletas, intimidaron a clientes y empleados, y se llevaron una suma considerable de dinero junto con objetos personales. Las autoridades atendieron al llamado rápidamente, pero los delincuentes ya habían escapado.

23 de mayo: tiroteo en Banco Mundo Mujer

El 23 de mayo, la sucursal del Banco Mundo Mujer en Santa Marta fue el escenario de un intento de robo que terminó en tragedia. Dos individuos armados intentaron llevar a cabo un taquillazo, pero fueron sorprendidos por la policía. El enfrentamiento dejó a uno de los asaltantes y a un civil muerto, mientras que otros tres resultaron heridos. La rápida intervención policial impidió que los delincuentes lograran su objetivo, pero a un alto costo humano.

24 de mayo: asalto a carro de valores

La noche del 24 de mayo, un grupo de delincuentes atracó un camión de valores de Prosegur mientras abastecía un cajero automático de Bancolombia en la rotonda de Mamatoco. Cuatro individuos armados en motocicletas despojaron a los guardias de la tula con dinero y sus armas de dotación. Se estima que el botín asciende a 300 millones de pesos.

27 de mayo: Falabella última víctima

El 27 de mayo, cuatro hombres armados asaltaron la sucursal del Banco Falabella en el centro comercial Makro. Tras intimidar a la cajera, lograron sustraer 5 millones de pesos y dos teléfonos móviles de alta gama antes de escapar. Las autoridades están revisando las cámaras de vigilancia en busca de pistas sobre los asaltantes.

VER: En Twitter relato de atracos alrededor de la Universidad del Magdalena

Preocupación de la comunidad

La frecuencia y violencia de estos robos han generado una ola de preocupación entre los ciudadanos de Santa Marta. La comunidad teme por su seguridad y la de sus bienes cada vez que visitan una entidad bancaria. Los residentes expresan su miedo de ser víctimas colaterales de estos violentos asaltos.

Este miedo ha llevado a muchos ciudadanos a evitar acudir a los bancos a menos que sea absolutamente necesario, prefiriendo usar servicios en línea cuando es posible. No obstante, no todos tienen acceso a la banca digital, lo que agrava el problema para aquellos que deben realizar transacciones en persona.

Además, el impacto psicológico de vivir en una ciudad donde los asaltos armados se han vuelto tan comunes no puede ser subestimado. Las constantes noticias sobre robos y enfrentamientos armados contribuyen a una sensación generalizada de inseguridad y desconfianza en las instituciones encargadas de proteger a la ciudadanía.

¿Para qué se utilizan los dineros robados?

Una de las grandes incógnitas es el destino de los fondos robados. Se especula que estos dineros podrían estar siendo utilizados para financiar actividades delictivas más grandes, como la compra de armas y vehículos, o incluso para alimentar redes de narcotráfico y crimen organizado. La violencia y coordinación de los asaltos sugieren la existencia de bandas criminales bien organizadas y equipadas, con acceso a recursos significativos.

Compra de armas y equipos

Los fondos sustraídos podrían estar destinándose a la adquisición de armas de fuego y equipos de alta tecnología que permiten a estos grupos criminales operar con mayor eficacia y violencia. La mejora en el armamento y la logística criminal indica que estos grupos están invirtiendo en capacidades que les permiten realizar operaciones más audaces y peligrosas, como lo demuestran los recientes enfrentamientos con la policía.

Financiamiento de redes criminales

Otra posibilidad es que el dinero robado esté siendo utilizado para financiar otras actividades ilegales, como el tráfico de drogas. Estos crímenes requieren una base económica sólida para mantener sus operaciones, y los robos a bancos y camiones de valores proporcionan los fondos necesarios. Además, el dinero puede estar siendo lavado a través de negocios aparentemente legítimos para evitar el rastreo por parte de las autoridades.

Expansión de influencia criminal

Con los recursos adquiridos, estos grupos pueden también estar buscando expandir su influencia y control territorial. La compra de lealtades y el establecimiento de bases operativas en diferentes áreas permiten a estas organizaciones aumentar su poder y capacidad de intimidación tanto sobre otras bandas como sobre la población local.

Respuesta de las autoridades

Las autoridades locales han intensificado sus esfuerzos para contrarrestar esta ola de crímenes. Se han implementado patrullajes adicionales y se está trabajando en la mejora de las medidas de seguridad en los bancos.

Además, la Policía Metropolitana de Santa Marta está revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad y solicitando la colaboración de la ciudadanía para identificar y capturar a los responsables. La cooperación entre la policía y los ciudadanos es crucial para desmantelar estas redes criminales y prevenir futuros ataques.

VER: En El Banco, también lanzan S.O.S por ola de atracos en diciembre

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